"No dudes de la duda, y duda.
Pero duda con fe, y aun duda de la fe.
¿Pues no es la duda inercia en la pendiente de la fe
hacia la obscuridad,
y fuerza en el impulso para alcanzar la comprensión?
No dudes, y sin embargo, duda
de todo cuanto creas verdadero
porque la duda también es verdadera,
en sí y por sí.
Dudando de la duda,
y dudando con fe y de la fe,
veras lo ilusorio de la duda y la fe
derrumbarse a tus pies...
y alzarse majestuosa ante tus ojos
la duda hecha Verdad".
De la Obra "El Vuelo de la Serpiente Emplumada"